Gonzalo Osés
jueves, 25 de diciembre de 2014
#ANNOYOMICS + URBRANDS = Aaaa juugaaaaarr
Con Urbrands ha sido amor a primera vista, pero cuando le iba a invitar a una velada apasionada, mi conciencia, me recordó, que hace dos años, me entró el miedo al compromiso y deje tirado en el bar Estantería de Casa a su hermano #Annoyomics. Pero está vez, sentía que nuestras realidades navegaban a la par. Así que me prometi que si quería estar con Urbrands, primero tenía que volver a dar una oportunidad al malote de su hermano.
La cena con #Annoyomics fue rápida, lo que me encantó fue su fisionomía regordeta, y su manía de pedir los 252 platos del menú degustación en orden inverso, lejos de molestarme, me parecieron geniales, que pena que sean pura fachada. Lo que no me gustó, fue que se pasará media cena contándome los diferentes formas de ir de malote, a mi lo que me interesaba eran las que a él le permitían destacar. Lo mejor fue cuando me contó como su padre Ricardo se convirtió al tocar fondo, tras leer un papel escrito por otro, en el gran Risto, el más listo de la clase.
Si con #Annoyomics fue sólo sexo, con Urbrands había roma, la primera noche me preguntó "¿estás durmiendo?", otro momento de conexión fue ayer cuando me estaba explicado la importancia de la seguridad en el bus, y al lado una mujer gritaba al teléfono que casi pierde la condicional... Aunque a pesar de mis ansias, me costó conectar con él, pero una vez entrados en faena, me ha curado las alas rotas, me ha animado a remontar cual ave fénix, a permitir que me amen y volver a apasionarme. Por todo ello, y recordando al mago Joaquin Prat lo que viene ahora es "aaaa juuugaaaaaaaaarrrrr"
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario