Ayer Don Enrique Loewe decía en la inauguración de los IX Premio Nacional de Artesania, "hay que aprender a trabajar en equipo y atreverse a salir fuera, porque la artesania es verdad, es tierra , la nuestra". Me atrevo a añadir "y trabajar entre generaciones", para crear una propuesta de valor rozando la excelencia, en lo que la sabiduría de los mayores de cincuenta no se desperdicia, y es traducida a los nuevos entornos digitales de la mano de los jóvenes.
Ejemplo de todo ello es mi último descubrimiento, IKB191 el nuevo showroom de L.A. Studio, en la calle Arganzuela a la altura del callejón del Mellizo, en plena vuelta a sus orígenes al Rastro, adoptado hoy por los nuevos colonizadores de La Latina, con gusto por el diseño vintage genuino, pero sin el poder adquisitivo de sus padres del barrio de Salamanca. Por lo que a diferencia del showroom de Castelló, 8 no te quedas babeando ante piezas de coleccionismo de 5.000 €, sino que puedes llevarte a casa auténticos muebles iconos del diseño de hace medio siglo en perfecto estado por menos de 500 €, o una silla por 100 ó las cajas de caudales de seguridad de un banco por tan sólo 65 € la unidad.
Te recomiendo que no seas dominguero, y vayas a explorar entre semana, para poder disfrutar de la pasión de Rubén López, hijo y nieto de anticuarios, apasionado de las antigüedades de vanguardia. Porque es un placer escuchar cómo su abuelo le enseñó a descubrir tesoros.
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