Gonzalo Osés

Gonzalo Osés

jueves, 29 de agosto de 2019

El camino espiritual



Aunque lo intuyes en las primeras 67 páginas, hay que llegar al último párrafo  de la página 210 para entender en qué se centra el libro, “el camino espiritual que se explica en este libro ayuda a conectarnos con el Ser Superior y así sincronizarnos con su agenda y saber realmente  qué es lo que se necesita atraer en cada momento de la vida”. 

¿Y de los registros? Pues casi nada. Es decir, según el autor hay que realizar este camino para estar en la séptima dimensión, y ahí los registros es muy fácil canalizarlos. Amigo, en ese estado de gracia, de alta vibración es fácil canalizar registros y ser un creador de amor incondicional sin quedarte sin energía. Porque desde mi humilde experiencia, para canalizar registros akáshicos no hace falta ser pleno. 

Una vez que asumes que el autor describe los pasos a dar para realizar un camino espíritu libre de apegos y circunstancias de anteriores vidas. Te relajas a disfrutar de su lectura, eso si, muy encapsulada, regada con múltiples ejercicios de decretos “repeticiones de oraciones cuál mantra para que se convierta en un hábito”.

Quizás, hay demasiado reduccionismo de temas importantes, de hecho el libro que me leí la semana pasada “el acompañamiento de almas” choca que se relativice tanto este tema aquí. Así que el resto...

Eso, si, sirve para entender de forma sencilla y amena, una cantidad de términos que empiezan revolotean como karma, viaje astral, lazos karmicos, merkabah, llama violeta, llama Triana, Dharma, etc... 

Con lo cual, lo comido por lo servido. 

Una sugrencia, eliminaría de la portada las palabras “registros akáshicos” porque no se dedica a ellos ni el 3% del libro, dando más valor a lo que si es “el camino espiritual para ser”. Lo cual, puede ser más estratégico. 


martes, 27 de agosto de 2019

Septiembre rugiente


Se acaba agosto, han sido semanas locas de romper la rutina, los horarios. de hacer aquello tan esperado y tan diferente que anhelabas durante la primavera. Viajar, convivir con los seres queridos de nuevo al 100% sin jornadas laborales de por medio, ayuda a evadirse y sobre todo a conocerse, a recordarse como realmente eres, sin excusas ni ataduras, tan solo tú en estado puro. Donde muchas veces del dicho al hecho hay un buen trecho. 

Septiembre espera rugiente a la vuelta de la esquina, nuevos proyectos esperan a ser lanzados a la piscina, haya o no agua, septiembre no espera. La segunda oportunidad de enmendar el año es ahora, y si no coges ese tren, hasta enero no tendrás otra oportunidad de coger una serie de olas que te lleven triunfador a la playa. 

Con todo, sabiendo tus pros (muchos) y tus pequeños pero contundentes lastres, toca sanear los segundos, para dejar alcanzar ese éxito personal que tanto anhelas y te constriñes de forma inconsciente, repitiendo un patrón al que asistes absorto sin saber como una vez más se te ha descontrolado la cosa. Como el espíritu indómito y rebelde te sabotea la jugada. 

Septiembre, rugiente, te espera para qué surfees sin que la rompiente te empuje contras las rocas, que provocan esos olas en forma de tubo tan bellas. 

Buena ola 


jueves, 22 de agosto de 2019

El acompañamiento de almas



El pasado día 5 de agosto, la maestra de reiki y registros akáshicos Berta Velasco me enviaba este mensaje por Instagram “me llegan a veces mensajes, y en relación contigo, me vino que no eres conector de personas sino de almas. La frase me llegó con la imagen del libro que te paso. Yo tengo pendiente terminarlo y volverlo a leer”

Si algo he aprendido es a escuchar las señales, y aunque el tema me dé respeto, pensé que el libro "El acompañamiento de almas" de Marie Lise Labonté, me vendría bien para el acompañamiento de potenciales emprendedores que hago. Una lectura perfecta tras el apasionante libro “El increíble viaje de las plantas” y comenzar a estudiar el increíble viaje de las almas. Justo unos días antes del Venus Start Point el martes 13 de agosto.

Seamos sinceros, ¿jamás te has planteado cómo es el tránsito de la vida a la muerte y el siguiente estado vibracional? O ¿en qué se sustenta la vida? 

Muchas gracias Berta por el regalo, por abrirme una puerta a un mapeo ameno y comprensible que intuía, y no encontraba la metodología para entender los procesos que pueden sustentar la vida. Explicándolo con pelos y señales que cada “alma ha elegido encarnarse, ha venido para cumplir un propósito de evolución, para compartir sus cualidades y elevar ciertas vibraciones densas que se perpetúan en el planeta”. Y cuando la personalidad se desvía de ese propósito, “la dimensión más elevada del alma hace una llamada a la personalidad para que ésta modifique su conciencia y se alinee con su propósito… Lo que esos poderosos impulsos vibratorios provocan son grandes sacudidas en la estructura energética y en la psique del ser cuya finalidad es expulsar los residuos que se han acumulado a lo largo de anteriores reencarnaciones y que bloquean la evolución del alma”. Es decir, ¿te suena de algo la crisis de los 40?

Por tanto, el libro describe como son las almas, como se encarnan en esta vida, cómo transmutar los apegos, vía amor incondicional como leí en la "La maestría del ser". Todo ello, para enseñar a acompañar a las almas que transitan entre esta vida y otro estado de consciencia. Cuya descripción por memorizada casi minuto a minuto lineal es, por lo menos, muy interesante. 

Conseguí leerme la mitad antes del Venus Start Point, y me sirvió como teoría para realizar la práctica. Cada ocho años, la conjunción de Venus con el sol, al anteponerse entre la Tierra y Lorenzo, tiende a rebajar la gravedad que nos ata al centro de este planeta, facilitando la elevación de la energía y consiguiendo que puedas acceder vía “meditación/renspiración” a otros planos de tu consciencia mucho más fácilmente.

Al igual que Berta, me queda releerlo con más calma, y hacer los ejercicios, para entender el origen de mis bloqueos, mis apegos, con el objetivo de poder ayudarte, y no dejar que otras personalidades manipulen mi energía. 

En definitiva, un libro que, si eres capaz de apartar tus creencias, podrás abordarlo y disfrutar de su amena lectura. A las malas, puedes leerlo como una novela de ciencia ficción, que te enganchará porque habrá aventuras que resonaran en tu interior. Otra opción es esperar a que alguna plataforma digital haga una serie... 

Buena vibra


martes, 20 de agosto de 2019

Actualizar el significado del verbo meditar



Estimadas personas del departamento de actualización del español, de la Real Academia de Española (RAE), para mejorar el bienestar de las personas de habla hispana es estratégico que actualicen el significado que le dan al verbo meditar. 

El significado “pensar con profunda atención en algo”, ya cumplió su función, cuando la mayoría de los adultos aceptábamos que para tomar decisiones había que sopesar racionalmente los pros y los contras. Porque como ya está comprobado científicamente, la mayoría de las decisiones no son racionales, si no, irracionales, de ahí el gran éxito del neuromarketing y la programación neurolingüística (PNL), con la que la publicidad nos hace creer que comprar o “rentingnear” algo nos va a proporcionar alegría o paz. 

A fecha de hoy, martes 20 de agosto de 2019, al verbo meditar se le da justamente el significado contrario, es decir, el objetivo es dejar de pensar, parar la mente, para en efecto, prestar profunda atención a tu respiración diafragmática, y poco a poco vas entrando en un estado de trance, donde la mente desconecta y te permite escuchar al universo a través de tu vibración interior. Accediendo, no solo a estados de calma anti estrés, sino, accediendo a la memoria universal que son los registros akáshicos, o al dialogo por telepatía con otros animales o plantas. Con toda esa información recibida, en efecto te puedan llevar con el tiempo a tomar decisiones, que te liberen de tu carga personal. En todo ello, lo que desaparece es el verbo “pensar”. 

¿Nuevos significado? Ustedes sabrán escuchar a las personas expertas. Mi humilde aportación podría ser “respirar con profunda atención en la respiración diafragmática con el objetivo de parar la mente y escucharse a uno mismo, para la posterior toma de decisiones”. 

Quizás, hay que crear un verbo nuevo, quizás pudiera ser “reNspirar” como contracción de los verbos respirar e inspirar, porque cuando medito lo que hago es eso, respiro para escucharme la inspiración que me lleva a la toma de decisiones.

En sus manos está, abrir la puerta para que cada persona pueda encontrar su propósito vital, y pueda transcender en esta vida, a la que hemos venido a aportar amor incondicional a los demás.  

jueves, 15 de agosto de 2019

El increíble viaje de las plantas


Hace unas semanas te recomendé como libro del verano, el anterior libro de Mancuso “Sensibilidad e inteligencia en el mundo vegetal", y ciertamente, el libro “El increíble viaje de las plantas” sí que es ideal para el verano porque aglutina trepidantes historias de aventuras, de piratas, de viajes imposibles, donde el famoso anuncio de Shackletonse queda en un juego niños. Y lo más sorprendente, los protagonistas son plantas, arboles, y sobre todo semillas. 

Porque no solo descubrirás como una planta originaria del volcán Etna colonizó Gran Bretaña, o como llegaron a una isla volcánica que apareció en los años sesenta en el atlántico, si no, al descubrir que existen los Hibakujumoku “los árboles expuestos a la bomba” de Hiroshima, a tan solo 400 metros del epicentro y siguen vivitos y coleando. O cuando el congreso de USA estuvo a punto de importar hipopótamos para acabar con una planta que anegaba los ríos de Luisiana… 

Otro enigma resuelto son los casi cuidados parentales que hacen los arboles con las plantas jóvenes a través de sus raíces, o una palmera canalizando el agua de lluvia que la cae a sus hijas en su base… 

Te deja a cuadros los viajes en el tiempo que lleva viviendo el viejo Tikko desde hace 9.460 años, y, sobre todo, la capacidad de las semillas para germinar dos milenios después de que los romanos tomaran el fuerte de Masada en Judea. O cómo a través de un tejido, se ha clonado y revivido una planta que quedó atrapada en el Permafrost hace 39.000 años… Por no hablar del Pando de 43 hectáreas que se sigue reproduciendo un mismo individuo genético desde hace 80.000 años...

E incluso, hace un repaso a los arboles con más voluntad que el alcoyano, y sobreviven allá donde no es comprensible la vida como la acacia del Teneré o el abeto de la isla de Campbell cerca de la Antártida... 

O el por qué de la existencia de frutos gigantes como el aguacate donde los enormes animales que se los podían comer de un bocado desaparecieron al llegar el hombre a América. Y cómo, ahora el hombre le vuelve a robar al aguacate su identidad de género al eliminarle su semilla y por tanto su sexualidad, y su capacidad de auto reproducción. 

Como anécdota extravagante, resaltar la de August Engelhardt, el primer vegano del mundo, allá por el siglo XIX, sorprendentemente en 1875 que fundó la orden del Sol, tras escindirse del movimiento hippie Lebensreform. El cual se compró una isla para poder vivir con sus adeptos a base de cocos y practicando el nudismo. Sí, has leído bien, un siglo antes, de que nos vendieran el movimiento hippie de los setenta del siglo XX...

En definitiva, un libro de pocos más de cien hojas, que combina aventuras de ultramar, guerras y batallas, con la gracil mano de Stefano novelando hechos históricos y científicos, sin bajar la tensión de cada historia. Un verdadero placer.

Buena lectura

martes, 13 de agosto de 2019

Los lunes al sol


Es el título de una película de Fernando Leon, que retrata un aspecto que ha vivido la mayoría de personas que conozco, el desempleo. 

Esa situación, en la cual te invade una sensación de infelicidad mayúscula. Al haber asumido gratuitamente que si no aportamos valor a los demás, somos inútiles para la sociedad y por tanto, no merecemos recibir ni una cantidad económica para pagar nuestro status social vía facturas. Ni lo más importante, tener derecho a asistir al atasco mañanero de cada lunes, donde las almas libres del fin de semana, se visten con  la actitud de cordero Mientras llegan a la oficina convertidos en dóciles humanos sumisos ante la duda a cómo llegar a final de mes.  

Pues bien, como puedes ver en la foto, ayer tuve un fantástico lunes al sol, reeditando con una prima una foto que hace 41 años estuve con mi madre. ¡Que se dice pronto! En lo alto del monte Veleta a 3.300 metros de 0altura. Disfrutando con la familia de un momento que se debería repetir dentro de 41 años. ¿Dentro de 41 años con...? 

Puedes pensar, que como acompaño personas en su renacer profesional, por ello, me remuneran, pues estoy, en plenas vacaciones. En parte, no te falta razón, sí, estoy de vacaciones, a la par que trabajando. Como buen autónomo, unas horas antes estaba en el coche whasapeando con una emprendedora que mentorizo y conectando a otros emprendedores entre sí. 

Es decir, desde hace unos meses, empiezo a ser consciente, que no hace falta que curre 40 horas semanales para cubrir mis necesidades vitales. Tras irme desapegando cosas materiales, en las cuales, su adquisición o renting no residen mis estados de alegría ni mi espiritualidad. 

Puede que camine hacia una vida en la que me compensan por mi talento, para apartar valor a otras almas en su tránsito de su realización personal, allá donde sea necesario mi presencia. Viajando como zona de confort. 

PD: Hoy es Venus Start Point, la conjunción del planeta Venus con el sol, cual eclipse. Noche para meditar y escuchar los deseos del alma, y en lunas venideras, atreverse a ejecutar ese propósito vital, ¿cual es el tuyo? Que te permita convertir tu vida en sonrientes lunes al sol. 

PD II: hoy es martes y trece y el refranero está hecho para coartar tu libertad personal y limitar tu maestría. Es decir, hoy viaja meditando a otros estados de conciencia de tu alma como cuando duermes. 


Buena meditación 

jueves, 8 de agosto de 2019

Baños de bosque


Comentaba Pablo Doménech en su libro "Liderazgo Kumano", que el Kumano Kodo, no tiene un principio ni un fin definido, siendo un continuo rompe piernas subiendo y bajando montañas, siempre cubierto por un profundo bosque, bajo el cual llegó a su punto Zen y cómo al volver a la ciudad se estresó.

La explicación la da el investigador Yoshifumi Miyazaki en su libro "Shinrin-Yoku, baños curativos de bosque" porque hemos empezado a vivir en ciudades hace tan solos tres siglos, y cuando volvemos al bosque nuestro cuerpo lo reconoce, y se relaja, reduciendo el estrés. 

Por ejemplo, el contacto con la madera disminuye la actividad cerebral de nuestra corteza prefrontal y aumenta la actividad del sistema nervioso parasimpático, otro efecto fisiológico de la relajación. Curioso que la palabra “corteza” sirva para denominar una parte de nuestro vital cerebro. 

A lo que el gobierno japonés les dio en 2004, 2,5 millones de dólares para que investigaran cómo se reduce el estrés con la actividad forestal. 

Para los excepticos decir que hay un capítulo entero donde explica los resultados de cada experimento al medir la reducción del estrés en la actividad cerebral, el sistema nervioso autónomo, los marcadores de estrés en la saliva, la actividad inmune. En diversos experimentos, como pasear bajo los árboles, meditar al lado de una cascada, tumbarse en una hamaca en el campo, cuidar un Bonsai, mirar las estrellas, pasear por el parque, actividades con caballos o perros…

Uno de los aprendizajes que me llevo, es comprender que a diferencia de la fe cristiana y posterior cultura occidental, la cultura japonesa concibe que las plantas están al mismo nivel que las personas, conviviendo con ellas como iguales, sin creerse superiores ni estar en contra de la naturaleza. E incluso consideran a los árboles canales para las almas de los dioses. 

Lo bueno, es que el libro no solo pone ejemplos para volver a sincronizarnos en un bosque, si no, que da muchas pistas para que lo podamos hacer desde casa y en nuestros parques y bosques, explicando de forma concisa cómo andar en el monte o cómo meditar de forma sencilla. 

Buen camino

martes, 6 de agosto de 2019

Quien abre camino...



Sin patria, sin rey, sin sombra, sin techo,
Sin lobos que digan si tengo derecho.
Sin rumbo, ni asfalto, peaje ni encaje,
Sin premio, sin precio, quiero ser salvaje.

La oscuridad me da miedo,
Soltar la mano me da miedo,
Quien abre camino, no tiene quien le dé consuelo.

Con todo, con todo, atravesaré la vida.
Con todo, no me quedaré en la orilla.

Sin credo, sin ley, esa es mi certeza.
No quiero un jardín, sólo campo y maleza.
Sin foco, sin flash, sin astro ni estrellas.
Sin fe en la luz que viene de fuera...

Esta canción por nombre “Quien abre camino” del barcelonés Enric Montefuco me llegó al alma en su concierto del 17 Festival Ribeira Sacra mientas me conectaba con las meigas gallegas. Desde entonces acuna mi ser. 

Vuelvo a los madriles, tras 23 estimulantes horas en Barcelona, tras enterarme que unos amigos, diseñadores, a los que admiro, volvían esta semana a su ciudad, tras trabajar innovando el resto del año por Sudamérica. Después de la emocionante conversación, que bien vale un ida y vuelta en el AVE, creo que el himno de Montefusco describe muy bien el mundo real de la innovación, el que escapa a los focos de las redes sociales de captación de datos.

También, estaba en Barcelona, una alma libre, maga del aquí y del ahora, de la coherencia del ser en el presente, el verdadero regalo de la vida, ¡disfrutarla! Energía en estado libre, sin apegos, sin querer domesticar a nadie, tan solo, con su alegría dibuja sonrisas en los que la rodean.

En definitiva, dos clases magistrales sobre cómo “atravesar la vida, y no quedarse en la orilla”. 

¡Muchas gracias!

Con todo, sigamos abriendo camino, ya que es nuestra esencia. 

Aquí, tienes el videoclip de la canción, disfruta:



PD: foto inicial de escultura jardín de Fundación Joan Miró

jueves, 1 de agosto de 2019

Kumano, el camino de Santiago japonés


El libro "Liderazgo Kumano" se me apareció en la reciente feria del libro de Madrid, esa puerta tori de la portada me llamó la atención, justo una semana después de darme cuenta que ese símbolo estaba en WhatsApp, al ojear sus hojas vi fotos de caminos de montaña y una analogía al camino de Santiago japonés. Así que trae para acá, que me lo compré.

Al empezar su lectura, me saltaron todas las alarmas y se me cruzó el libro a las pocas páginas. Tras la romántica introducción aterrizando en que hay más caminos. El autor planteaba que había tres libros en uno, uno contando su experiencia del camino, otro con palabras que le iban surgiendo como director de empresa y por último una parte que lo llamaba Sistema Kumano que literalmente desparramaba su idea de dirección, su legado al mundo, a quemarropa, sin anestesia… 

Lo malo ya no era el contenido, si no, que la forma desde la utilización de una tipografía oronda, como para llenar más páginas, unidas a las constantes interrupciones de cambiar el color de la tipografía, así como escribir en mayúsculas las palabras que el autor considera clave, se me hizo bola. Al ursupar la capacidad de descubrimiento del lector, y querer dirigir mi atención y aprendizaje, consiguiendo justo lo contrario. Encima, andaba jodido porque me obligo a leerme los libros enteros, y empezando las vacaciones, pues estaba que rezumaba culebras de expectativas aniquiladas.

Como dice mi amigo Ernesto del Valle los libros además de leerlos hay que digerirlos, y yo estoy en pleno proceso de aprendizaje del "La maestría del ser”, uno de sus aprendizajes es si algo rechazas de otra persona, es que eso que no te gusta, ya reside en ti. Así que, tras darme el respiro de la comida y la siesta veraniega, analice qué me rechinaba en esa forma de plantear tres libros en uno y de esa forma que coartaba tanto la lectura… ¡eureka! Me espejeaba lo negativo de mi libro, donde por querer hacérselo más fácil al lector, lo inunde de códigos QR con enlaces, que luego a posteriori muchos de ellos o no iban al contenido correcto o dejaron de enlazar, aunque me costó una pasta, y sobre todo la falta de un editor crítico que le haga más empatica la lectura al lector. 

Entendida que mi rabia era interna, retomé la lectura del viaje de Santiago, agradeciendo desde aquí la enorme honestidad de su relato, hasta rozando temas muy personales, como verás si llegas al final de este camino literario.

En definitiva, un libro que merece su lectura por todo lo que se descubre sobre el enigmático camino Kumano kodo, y el reflejo transformador hasta cierto punto de su autor. Incluso las reflexiones que acompañan el relato se hacen amigables al ser conceptos  empresariales certeros. Lo que me cuesta ligar es el plan de empresa que propone en la tercera parte como una metáfora del camino Kumano. Puede que al ser muy industrial el enfoque del autor, por mi parte no consiga verle el sentido. 

Buen verano, disfruta con la lectura en modo evasión..