El pasado 30 de
noviembre posteaba aquí mi necesidad de aprender a ser empático con las
personas que me piden feedback de cómo serlo ellos con sus clientes. Al ser un
tema de suma importancia, adopto una actitud seria, y como tengo buen ojo para
levantar la alfombra a las primeras de cambio, pues mi argumentación se
convierte en una bofetada para su ego, poniéndose a la defensiva.
El primer intento
de aprender a dar feedback asertivo fue la lectura del libro de la semana
pasada, y si has leído el post anterior sabrás por qué se me atragantó. Por
otra parte, tenía pendiente leer "El libro del networking" de Cipri Quintas al cual conocí
virtualmente por un artículo de Alejandro Suárez y luego en LinkedIn.
Javier Sirvent
amigo en común, a veces me presenta como “El Cipri sin restaurante”, pero tras
leer su acariciador de egos, sé porque él tiene un templo donde cocina amor, y
yo tan sólo un hashtag de comidas…
Hay una cita en
su libro creo de Kung Fu sobre como el maestro aparece cuando el alumno está
preparado, pues tal cual, las enseñanzas que he recibido de Cipri son oro puro
con un fino aderezo de bitcoin.
GRACIAS
Gracias por
desafectarme mi dolor, de mi honda preocupación al afrontar un feedback siendo
clave “ser sincero y claro con los demás, atreverse a decir las cosas, con
respeto, cariño y a poder ser con un humor”. Muchas gracias, ¡eso era! Actuar
desde el amor verdadero, desde el cariño y a poder ser provocar una sonrisa. Sin
adoptar una postura de seriedad.
Escuchar y dar
sin esperar a recibir, es el mantra que envuelve el recetario de verdades como
puños que recoge esta biblia de comunicación, de relaciones humanas. Redactado
desde y para el corazón, consiguiendo que tu ego invite a Cipri a sentarse a la
mesa. Lo han titulado el libro del networking, pero también podría haber sido
valido “las 75 enseñanzas de Cipri” ya que de cada capítulo sacas una manita de
aprendizajes, o con toda humildad “El libro de la verdad”, la que nos hace
humanos, empáticos y asertivos.
Me permito
plantearte una ciprillada, consistente en cuándo te leas la genialidad sobre
las madres, ve a enseñárselo a la tuya, y que lo lea de tu libro, lo de hacer
una foto y enviárselo por mensaje no tiene sentido. Y si no la tienes cerca, ya
tienes una excusa para volver a disfrutar de sus excelentes guisos.
Me parece genial que sigamos encontrando en el blog de Opiniones Mindcapital, temas relacionados y bastante polémicos.
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