Eres Smart y lo sabes

A estas alturas del año, me atrevo a escribir que “Smart internet(s): la investigación” de  Frédéric Martel (Taurus) es el libro del 2015. Porque es mucho más que una justificación para decir que la tecnología en internet es uniforme, y que cada entorno la personaliza o la utiliza según sus necesidades. Para ello, basta con leerse el epílogo, o saltar de escenario y pensar en la personalización de Mc Donalds en cada país, en España nos dicen que la carne es de vaca extremeña, ¿imaginas que les dirían si dijeran lo mismo en la India?

Internet nos da respeto, porque es el primer reto global al que todos nos enfrentamos a nuestros miedos, para aprender a vivir en otra dimensión, la de la conexiones. Donde las barreras de acceso a ciertas economías se han derrumbado, permitiendo que África pueda pasar del siglo XIX al XXI en unos años. A la vez, que nuevas multinacionales se han erigido dándote soporte a cambio de tus datos, con lo que se han convertido en el azote de los gobiernos tradicionales y la duda existencial de neutralidad en la red.

Con Frédéric no sólo te vas de viaje por cada continente, visitando los centros neurálgicos de las revoluciones sean tecnológicas o posibilitadas por ella. Sino que consigue que tanto los padres de la criatura, como los que administran el poder mundial tradicional, se desnuden contándondote sus miedos y su manera casi experimental de actuar. Las palabras de Ángela Merkel casi seguro que no se las ha filtrado el gabinete de prensa. Escuchar como Carlos Slim SR se forró contado por su hijo, las claves de Alibaba, cómo la India es el granja de USA,  o el reto de TVGlobo en Brasil, o el ego desmedido de los japoneses, o como utilizan lo árabes la red, o las claves por las que Israel se ha convertido en el país con más porcentaje de start ups, o porque sería más interesante invertir en cables submarinos de fibra óptica que en ladrillo para crear una Smart City.

Y la clave es que todos somos Smart y no me refiero a inteligentes, sino a la capacidad de crear ante la adversidad y comenzar de nuevo (Start), y el libro está plagado de multitud de ejemplos estratégicos concretos, que te pueden ayudar en tu día a día, ya seas periodista, comercial, ingeniera, amo de casa, abogada, parado, estudiante... porque eres Smart y lo sabes.